miércoles, noviembre 15, 2006

"Tan bonita y tan loquita"

Estaba pensando, en por qué de niños, nos gusta jugar con agua, y me acordé de Vander, mi objeto de transición (o como se llame), que era un amigo imaginario y que vivivía en el baño amarillo de mi casa (antes de las remodelaciones, que no han terminado porque cuesta caro y no se a quien se le ocurrió cambiarlo todo de un jalón, en mi casa había baños de colores, con los accesorios y todo del mismo color...y era bonito, rosa, azul, amarillo...ahhh que tiempos).

Bueno, Vander vivía en el amarillo, y casi nunca le gustaba salir de ahí...y tenía amigos como la Sirenita o la bella Rockerita... en tonces, yo...me la pasaba en el baño, lavandome las manos como enfermita y desperdiciando agua, mientras hablaba con Vander.
Supongo que para mi familia era de lo más normal verme hablar y hablar y hacer fiestas para Vander y su amiga Rockerita (que yo se la presenté), en donde comían lunetas y chicles de plátano, porque eran sus favoritos ya que eran amarillos.
Pero no sé que pensaría ahora yo, si alguno de los engendros familiar mío hablara y hablara por horas con su amigo imaginario...seguro me pondría a analizarlo, y me da miedo, porque sería patético...
Dice mi mamá que tenía voz de ardilla que pronuciaba erres y eses perfectas y siempre hablaba cantando (tan romántica desde siempre jo jo), y yo recuerdo vagamente a la Daniela de ese entonces, tan loquita corriendo y escondiendose por donde fuera, hable y hable..., pensando en dulces y en cariños familiares, en Mamá Diana y Mamá Olga, Papá Javier...y en lo extraños que resultaban mis padres biológicos, ni me acuerdo de ellos...sólo de las veces que mamá me regañaba por haberme comido otro labial rojo/naranja (que eran sus preferidos, por su blancura pálida) que a mí me sabían como a flores de bugambilia.
También recuerdo los zapatos de gamuza azul turquesa y el paraguas rosa, dignos de la rídicula de mi...


(osh, esta versión beta de blogger, me sacó de onda, además tiene unas letrotas!)

1 comentario:

Joseoso dijo...

Mi chiquilla adorableeeeee...
yo nunca conte con amigos imaginarios, aunque en alguna etapa de mi vida seguro los necesite, pero encontre acompañamiento con mi primer consola de videojuegos, mi querido atari 2600
Ahh que feliz era yo...
Ahora tambien soy feliz pero es diferente, por que no siempre tengo un joystick a la mano.