Viernes,...aburrimiento, cansancio yyyyyy...sin ganas de hacer nada.
Desde que sono el despertador tuve la impresión de que hoy sería uno de esos días tibios en los que ni fu ni fa.
Fui a la escuela y no entre a mi única clase de los viernes, y obviamente nadie de la oficina entro...pues cómo para qué, ja.
Luego sali y muy a mi pesar tuve que despedirme de Wichi. Llegué a casa con intención de dormirme, pero la pachanga de mi madre exigia estar despierta para lo que se ofreciera, como a la media hora me escurrí diciendo que tenía "muchas cosas" y en efecto, tengo que cubrir un temario, comenzar un ensayo y tenía que preparar la "clase" de mañana.^
Para acompañar las actividades me subi una botella de Sidra de la navidadt que sobró, me mareo un poco pero continue.
Como a eso de las 6 llego Luisito y me pidió que lo acompañará a su maratón de lectura, obviamente acepté porque: escuela+ niños+ lectura en mi idioma se concibe como una actividad aceptable y en ocasiones entretenidisima.
No aguante mucho porque mi apatia era excesiva, así que regresé a casa y preparé unos Alfonsos...me subi uno a mi recamara...y me puse a "trabajar y trabajar", luego baje por otro, segui, baje por otro, baje y lo bebí abajo pensando "chale esto ya me dio asco", pero la cerveza no me gusta además de que sería un cambio total y un tanto desagradable.
Luego no sé que paso porque no me acuerdo creo que acompañé a alguien a la parada del metrobus y regrese, o fui a la tienda y regresé...me dolia el estómago.
De pronto recordé que habia planeado jugar memorama con los niños y aún no lo tenía...lo hice rapidín y ahora estoy escribiendo mientras escucho a Stevie Wonder y bebo más Alfonso, no màs para que no digan que ni estuve en la fiesta.
Tengo ganas de bailar, pero así a lo bestia, ayer wichi y yo bailamos y las cosas terminaron de cierta manera comprometedora, ahhh el viernes también bailamos y ahi si no paso nada, ja...pero yo traigo ganas aca, de puro reventón jajaja.
La realidad es que no iba a escribir sobre esto, sino más bien me iba a dedicar a alabar a los maratones de lectura de las escuelas, es una buena idea de adentrar a los niños en el mundo maravilloso de la literatura, ademàs de que por ahí observe ciertas actividades padrisímas.
Cuando niña, lo más cercano que tenía a eso era la FILIJ y me hacia muy feliz, pero no más cada año y uhhhhh a veces ni eso.
De verdad que los libros libran a la gente de viernes como este que me estoy chutando hoy, dejan muy buenos sabores de voca y tienen enseñanzas para la vida como aquello de "no soy borracho, soy cobarde" o "son infelices por no ejercer su derecho de hacer daño" ahhhh....
Creo que en cierta medida mi relación amorosa ha florecido por la afinidad lectora y eso me da gusto de verdad, ese chico se ha encargado de impregnarme de detalles que favorecen que se materialice aún cuando ya he logrado olvidarme por el uno momentos, como ayer...que veía las noticias y lo vi en la pantalla pero con otra forma, otra edad...pero eso si, igual de afectado que èl por el alcohol, jajajaja.
Creo que en ocasiones hay que tener cuidado con las afinidades, porque son peligrosas, a uno a veces también lo vuelven adicto...
Saludos a los visitantes!
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Hace 3 años.