viernes, agosto 03, 2012

A Nefastina:

"La historia nos demuestra que la arrogancia es un signo inequívoco de decadencia"
Xavier Velasco.
Verás, no me considero una persona que juzga, me gusta el chisme, sí, y la crítica constructiva como a todos; pero nada que haga demasíado daño, tampoco me interesa vivir la vida de los otros.. Pero contigo no puedo, te traígo cargando como un muerto y comienzas a apestar. He dedidido sacudirte de mi vida y no encuentro una mejor forma de hacerlo, más que mediante estas líneas, te voy a exorcizar...

Para comenzar, no te llamaré por tu nombre, puesto que hay muchas cosas en juego, entre ellas mi tranquilidad. Y no es que se trate de aventar la piedra y esconder la mano, no, no soy una cobarde, sino que hay quienes no entenderían esta manera sana de anularte, digo, bien podría ir a darte un golpe o gritarte en la cara todos los improperios que pienso sobre ti; Pero no, porque sé que eso es lo que esperas y yo además de que no voy a prestarme, jamás he sido tan mal educada...esto debe destacar cierta clase y buena educación (cosas que evidentemente no manejas). Bien, Nefastina, llevo días observandote, no es que quiera (ni lo sueñes), sino que insistes en hacerte presente en mi vida. Dentro de ese análisis he buscado motivos para explicarme el por qué te empeñas en ponerte esa máscara de cabrona. El resultado no es muy halagador, creeme. Por más que intento no logro ubicarte en dicha clasificación; Tus comentarios, tus acciones y en general tu vida sólo logran encasillarte con trabajos en la zona de las hijas de la chingada, y en muchas ocasiones en el de las pobres pendejas.

Lamento decepcionarte, sé que lo intentas con esmero, pero toda esa pseudo vida que llevas no es más que una pantomima. De niña mis padres me enseñaron ciertas normas sociales que habia de seguir al pie de la letra si no quería recibir tremenda regañiza: Saludar al llegar a todos los presentes, decir gracias y por favor, ser diplomático, no decir lo que se piensa sin antes análizar si pudiera ser correcto o no, respetar a los mayores, no trasgredir la intimidad de los otros, etc. Mis padres me llenaron de reglas sociales rosas y no me dieron armas para lidiar con gente sin clase, del vulgus, ordinaria. La primera vez que me tope con un con un mal educado me dio igual, pero un calvario he vivido desde que llegaste a mi vida, Nefastina.

Eres la clase de persona que se cree única e irrepetible, mujer de mundo, inteligente, culta, guapa y hasta humanista. Crees que tales cualidades te dan licencia para ser mal educada, prepotente y arrogante persona... Piensas que tienes el derecho de opinar y de "tomar cartas en el asunto"sin que nadie te lo pida. Para mí, Nefastina, no eres más que una hija de vecina que carece de todo lo antes mencionado y te resumo en una chica de bajo estrato, ordinaria, sin educación, que un día tuvo suerte.

Sin equivocarme puedo decirte que te detesto, pero no puedo deshacerme de ti porque no dependes de mí; eres de esas personillas que se convierten en una patada en el trasero, una mosca panteonera plantada en la cocina, el perro callejero que no deja de seguirme o una suerte de enfermedad crónico-degenerativa. Tienes la vida jodida, por eso insistes en joder otras, ¿o no? sino, no me explico por qué lees libros de autoayuda o pagas cursos y conferencias que te engañan diciendote que el origen de tus males actuales son tus vidas pasadas, tus relaciones fallidas o la repetición de patrones, cuando tú y yo sabemos que todo tiene origen en el hecho de que seas una mal cogida.
"Insatisfecha sexual", eso leo en tu rictus, tus ademanes lo demuestran, tu manera de ser lo demuestra. Por eso aunque sonrias siempre tienes el comentario inadecuado el que más hace daño, por eso te rodeas de gente a la que sabes puedes tratar como poca cosa, por eso eres capaz de tirarte a un güey y a la mañana siguiente negarlo y tratarlo como neardental.

Triste tu caso, Nefastina, el hecho de que no consigas a alguien que pueda y quiera llenarte, se ha conjugado con tu educación deficiente y tu alma podrida, lo que ha ocasionado que seas la mujer de pacotilla que aunque esta rodeada de lacayos baratones, no deja de saberse sola: La eterna tía solterona, la que se esconde bajo el título de "soy soltera por convicción y planeo pasarla cool". No te engañes, querida, tú y yo sabemos que estar sola no es convicción ni gracia y mucho menos algo que deseas, pero como ves no te queda de otra porque aún con todas tus "cualidades", nadie desea estar contigo; De ahí el hecho que no te parezca que otros sean felices y por el contrario pienses que son "enanos mentales".
Dentro de todo, fíjate que me das penita, pero no por eso voy a engañarme, finalmente tú así lo quisiste. Pudimos haber vivido tranquilas y lejanas: Tú en tu rollo ficticio y yo pensando "pobre mujer solitaria". Sólo una última cosa: Todo lo que das es lo que recibes, y por más trillado que suene, cosechas lo que siembras; Revisa tus parcelas, Nefastina, no vaya a ser que por ahí ya ande creciendo un árbolito de mierda.

Ufff no sabes que bien se siente desahogarme sin que gane más enemigos, mirame aquí tan tranquila tomando un café y dejando atrás mi rencor. Ya puedo volver a saludarte con una sonrisa lustrosa que imprima un sincero: "chinga a tu madre". Gracias Nefastina, gracias porque sin ti no podría decir: Cuz cruz, no quiero ser como tú, jodida.


Con todo respeto, D. Sonrisas Mágicas =D